miércoles

que sentimiento más sucio el de la culpa, el de sentir responsabilidad por algo y por más de tratar no pensarlo... es difícil. por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa- dice el curita en la misa los domingos con un sol de mierda afuera, yo en un vestidito azul que me cargaba, calcetines con blondita y toda la inocencia encima, mientras pensaba sobre las cosas que debía sentir culpa. Pensaba por ejemplo que con algo le había mentido a mi mamá, que no había escrito las páginas de cuaderno de composición (pero ya estaba castigada por ello), que de nuevo había dejado tareas del colegio sin hacer... Nunca pensé sobre las culpas de los demás, nunca pensé si él sentía que sus acciones eran reprochables o si tal vez en su enfermedad nunca lo supo. Era ahí en esa misma iglesia en donde debería haber gritado tan fuerte, hasta quedar sin voz, POR QUÉ MIERDA ME LLENAN DE CULPA SI CON ELLA NO PUEDO HACER NADA?. nunca en ese lugar dijeron que había que reconocer el error y tratar de arreglarlo, sólo dice: reconoce tu culpa hijo piensa en ella y fin... y las disculpas ¿cuándo? es gracias a esa misma culpa que no puedo sentir lo que realmente debo, y solo siento maldad por alegrarme de la desdicha de él y volver con el arrepentimiento del mundo y pedir porque todo pasé, porque la muerte no suceda a un AVE, porque la secuelas no sean serias... apuesto mi vida que de todas las personas que dañe, ninguna pide por mi bienestar, y no es malo eso, es humano... yo soy la que está mal... yo estoy mal. gracias por eso iglesia católica, ruega por la culpa francisco